En Octubre de 1979 Tom Petty y sus Heartbreakers publicaban su tercer álbum de estudio. Ya nos habían dejado muestras de su talento a través de la publicación de "Tom Petty And The Heartbreakers" en 1976 y el "You're Gonna Get It" de 1978. Temas como "Breakdown", "I Need To Know" o "Listen To Her Heart" eran prueba más que suficiente como para depositar esperanzas en estos tipos.
Efectivamente "Damn The Torpedoes" de 1979 se convirtió en un disco indispensable, probablemente el mejor de la carrera de Petty. No se encuentra mediocridad de la primera a la última de sus nueve pistas, más bien al contrario. "Damn The Torpedoes" solidifica el sonido que la banda trató de encontrar en sus dos primeros álbumes y les asienta en la élite.
"Damn The Torpedoes" fue compuesto y escrito en aquellos tiempos en los que Tom Petty mantenía una lucha legal con su compañía discográfica, y esa ira y esa frustración se manifiestan de manera contundente en las letras del álbum. Esa batalla contra MCA Records tras la venta del contrato con los Heartbreakers y la paranoia que rodeó la facturación de "Damn The Torpedoes" le dotan de una inmensa inspiración.
Petty había llegado a sonar enfadado y molesto en algunas ocasiones de sus dos primeros trabajos, como si tuviese algo que demostrar, pero en "Damn The Torpedoes" esto sucede como nunca. Su desilusión con el negocio de la música y la sola idea de no avanzar a pesar de tener todo el talento del mundo le provocaban urticaria.
La producción del álbum a cargo del propio Petty y de Jimmy Iovine le confirió una claridad de sonido podría decirse que magistral. La limpieza y sonoridad de cada uno de los instrumentos es asombrosa, y hace de su escucha una experiencia única. Jimmy Iovine ya había trabajado antes con Bruce Springsteen y con Patti Smith y fue el encargado de localizar ese sonido que Petty andaba buscando tras las producciones más ásperas de sus dos primeros esfuerzos. Conocedor de lo que Petty y los Heartbreakers tenían entre manos Iovine se puso en funcionamiento en una especie de proceso febril que revertió en el sonido musculoso, en la arrebatadora bofetada que sigue siendo a día de hoy "Damn The Torpedoes".
El registro vocal de Petty brilla en "Damn The Torpedoes", pasando de los gemidos quejumbrosos a los rasposos gruñidos de un mordaz Dylan. Su Rickenbacker produce ahora riffs firmes y solidos, destacables por su pulida producción. La ayuda de Mike Campbell en alguna de las composiciones y su imaginativa guitarra producen algunos de los mejores solos de una ya larga carrera. Por supuesto un conjunto rítmico de altura, el formado por Ron Blair en el bajo y Stan Lynch a la batería, permite que la conducción del ritmo no choque con los sencillos pero también enrevesados arreglos del álbum. Benmont Tench es capaz por si sólo de emocionarnos con algunos de los mejores momentos del "Damn The Torpedoes". Teclas maestras.
"Refugee" abre "Damn The Torpedoes" como una sincera declaración de intenciones. Es un tema de rock absolutamente infernal en el que las puñaladas de los teclados, el fabuloso trabajo de guitarra y las voces burlonas son el escaparate de una banda que toca por sus vidas. "Here Comes My Girl" muestra el auténtico y clásico sonido de una batería de rock and roll, mientras que "Even The Losers" se convierte en una especie de retorno al pasado en una búsqueda desesperada por dar con sus raíces. "Shadow Of A Doubt (A Complex Kid)" es un trallazo de rock en toda regla lleno de fantásticas voces y sonido espectacular. "Century City" rebosa eneregía y letras llenas de mensajes, en esta ocasión sobre su periplo con los abogados. "Don't Do Me Like That" fue el mayor éxito de "Damn The Torpedoes", y es un viejo tema de Mudcrutch que precisamente no iba a ser incluido en el álbum.
Tras los seis primeros cortes llega algo de calma a "Damn The Torpedoes", y se agradece. "You Tell Me", con su arrebatadora intro de guitarra y sus letras arraigadas en la indeterminación y en el misterio. El puente de guitarra es aquí verdaderamente glorioso. "What Are You Doing In My Life" devuelve al álbum a su frenético ritmo anterior. Su estribillo completamente pegadizo dice todo del tema. "Louisiana Rain" cierra el álbum poniendo la nota lenta y sentimental a través de su slide guitar y sus teclados llenos de sentimiento.
Definitivamente "Damn The Torpedoes" se convierte en uno de los mejores álbumes de rock clásico de la década de los 70. Un trabajo indispensable en la carrera de Tom Petty, crucial a la hora de entender su música y con unas elevadísimas cotas de calidad a las que por supuesto se acercaría en posteriores trabajos como "Hard Promises", "Full Moon Fever" o "Wildflowers". En cualquier caso, y en mi modesta y muy subjetiva opinión, "Damn The Torpedoes" es el que se encuentra en lo más alto.
Su obra más completa. Un clásico incuestionable del rock americano y que le proporcionó estar entro los grandes del negocio.
ResponderEliminarEl mejor Petty de los 70's.
Saludos.
Probablemente uno de los que más he escuchado a lo largo de mi vida. "Lousiana Rain" es impresionante.
EliminarAbrazos Rockland.
Efectivamente, su mejor disco para mí también, seguido de cerca por "Full Moon Fever". Yo empecé con "Into the great wide open" pero no fue hasta "Torpedoes" que me enganché. Creo que lo que más me gustó fue que me intridujo a un sonido nuevo. Conocía el sonido de la Rickenbacker a través de los Beatles, pero el sonido que le extraen Tom y Mike es alucinante. Y en cuanto a los solos, decirte que el de "Even de Losers", esa única nota repetida durante largo tiempo me provocó una tortícolis de dos semanas de tanto "headbangear". Tom es Dios. Lo que daría porque ticara por aquí... Saludos (Iñigo otra vez, no sé cómo hacer que aparezca en lugar de Anónimo :P).
ResponderEliminarTienes toda la razón Iñigo. Sabes, yo empecé con un vinilo doble de sus grandes éxitos. Después de eso quedé atrapado y llegué a este abismal "Damn The Torpedoes". Un músico colosal, de los que hay pocos, y una banda a su altura. ¿Tienes cuenta de Google?, creo que así aparecería tu nombre. Aunque esos comentarios comienzan a pillar un poso por el que se te empieza a distinguir.
EliminarAbrazos y gracias