Son casi 40 años de carretera, y Tom Petty y los Heartbreakers han seguido, como por otra parte era de esperar, una evolución. Desde el rock más conciso de la década de los 70 hasta su actual período de rock meditativo anclado fuertemente en las raíces de la banda, pasando por su época más melódica y relajada de la mano de Jeff Lynne. Es la última etapa de Petty y su banda la que ahora nos interesa, y es que dados los esfuerzos del rubio por descentralizar la industria musical y por mantener vivo el rock clásico de los 60 y de los 70, "Mojo", su último álbum de estudio hasta la fecha, publicado en Junio de 2010, era una consecuencia lógica y natural.
"Mojo" es la incursión de Petty y de sus muchachos en el mundo del blues y del rock and roll, un acercamiento directo a las fuentes de las que llevan bebiendo durante casi cuatro décadas. Un trabajo irresponsable, energético, optimista y lleno de improvisación, sin un sólo tema desechable y absolutamente coherente. Una honesta colección de música de verdad. Un retorno a las raíces del rock del sur de los Estados Unidos que tuvo, como Petty, sus mayores influencias en la más profunda tradición del blues.
En ese sentido se ha dicho que "Mojo" es el álbum de blues de los Heartbreakers, pero no es exactamente así. Es cierto, la influencia del blues en "Mojo" es innegable, pero todavía sigue sonando como un álbum de los Heartbreakers, y además lo hace con temas de cosecha propia. Quince temas impregnados de ese sentimiento blues pero anclados en el clásico sonido de la banda de Petty, rindiendo tributo a Led Zeppelin, la Allman Brothers Band o J.J. Cale. Y si, aunque el blues es el elemento central de "Mojo", es más una influencia que el factor predominante. Rock and roll, country, reggae, hard rock, jazz y psicodelia hacen que el conjunto funcione como una unidad, en un excelente juego compositivo.
Tom Petty, Mike Campbell y Ryan Ulyate producen "Mojo", y lo hacen del modo más minimalista posible, eso si, utilizando con acierto la tecnología. El álbum posee un sonido limpio fabricado, sin embargo, con todos los músicos de la banda tocando juntos en la misma sala, en una especie de revival de la vieja escuela, de los tiempos en las que las grabaciones se hacían de esta manera. El sentimiento de directo que se obtiene al registrar así los temas es algo impagable. Un álbum grabado y mezclado con la tecnología puesta al servicio de la música, con un impresionante sonido envolvente del que se benefician sin duda los teclados de Benmont Tench, otorgando a los temas más definición y profundidad.
La banda sigue siendo tan excepcional como lo ha sido siempre, pero además en esta ocasión hay una sensación de libertad que permite a cada miembro brillar individualmente mostrando sus inmensos talentos instrumentales dentro de una fabulosa compenetración entre todos ellos. "Mojo" ha sido escrito por y para ellos, para su disfrute, y eso se nota en cada corte del álbum, plagado de una madurez y una confianza que permite a los Heartbreakers encontrarse a si mismos.
La guitarra de Mike Campbell quema durante todo el disco, y no produce temor afirmar que probablemente sea una de las mejores interpretaciones de su carrera. Este es un tremendo álbum de guitarras, y Campbell se luce dotando siempre a los temas de "Mojo" del tono y del fraseo correcto. Es de suponer que la Gibson Les Paul 59 le ha ayudado en ello. El guitarrista supera esta vez sus reticencias a las florituras y ofrece una imagen despampanante. Especial atención merecen sus inmensos solos en "Mojo".
La armónica de blues de Scott Thurston es excepcional en "Mojo", y su guitarra rítmica juega un papel mucho más importante del que podría esperarse. Ron Blair, el tipo que en 1982 era sustituido por Howie Epstein y que en 2003 volvía a los Heartbreakers para "The Last DJ", vuelve a realizar en "Mojo" un trabajo fabuloso, compenetrado a la perfección con el baterista Steve Ferrone. Una pareja rítmica de altura para un trabajo que así lo precisa. Lo de Benmont Tench, pues en su línea. Da igual las teclas que toque, siempre sabe asegurar la atmósfera y texturas que cada tema necesita. "Mojo" no iba a ser una excepción.
Tom Petty sigue siendo un fabuloso contador de historias, un trovador moderno que empapa sus fabulosas letras de una ácida ironía. El vocalista y guitarrista consigue de nuevo crear composiciones casi perfectas, y lo que es más difícil, logra que funcionen como un todo, algo de un valor incalculable teniendo en cuenta como fue el proceso de grabación y la escasa post producción que sufrió después. El hombre sigue perfecto en las voces, sin afectarle lo más mínimo el paso del tiempo, y su guitarra rítmica sigue siendo excepcional.
"Jefferson Jericho Blues" abre "Mojo" como un homenaje directo a los maestros del blues. Después "First Flash of Freedom" y su línea de bajo jazzy que se solapa con la intro de guitarra que abre el tema que sutilmente lo conduce. Un corte con un Campbell absolutamente vigoroso en su trabajo de guitarra eléctrica, y que mantiene el sonido y las sensaciones del "Highway Companion" que Petty publicó en 2006.
La energía de "Running Man's Bible" y su rock and roll de la vieja escuela precede a "The Trip to Pirate's Cove", una lenta balada en la que el teclado de Benmont Tench podría perfectamente estar inspirado en el de Ray Manzarek en el "Riders In The Storm" de los Doors. Luego "Candy" y su elevado ritmo empapado de viejo rock and roll y "No Reason to Cry".
"I Should Have Known It" ofrece el blues desde un punto de vista próximo a Led Zeppelin mientras que "U.S. 41" es otra de las evidencias blues de "Mojo", antes de que "Takin' My Time" se llene de ese sonido bluesy y rock and roll que combinado con las letras de Petty muestra de nuevo a una banda en todo su esplendor.
"Let Yourself Go" un tema de aroma jazz, "Don't Pull Me Over" y su sentimiento reggae, "Lover's Touch" y "High In the Morning" y su tributo a las profundas raíces del blues, o "Something Good Coming" un hermoso tema que ejemplifica como Petty puede convertir en belleza algo simple en principio, el tipo de canción lenta que el rubio ha ido perfeccionando con el paso de los años, preceden al final del álbum, "Good Enough" una pieza de cierto toque a los Beatles con una larga coda.
"Mojo" fue un álbum no del todo comprendido por el público general, pero muestra a unos músicos de altísimo nivel haciendo lo que más les apetece hacer, y el resultado, sin duda, es muy bueno, un auténtico ejemplo de cuán básico debería sonar el rock and roll. Petty y los Heartbreakers lo mantienen vivo. A quien no le guste "Mojo" es que no ha entendido nada. Un disco que encaja muy bien con el espíritu del "Highway Companion" y de "Mudcrutch".
No olvidéis pasar por LA BANDA QUE NUNCA EXISTIÓ para dejar vuestra lista de esa posible mejor banda de la historia del rock, en formato comentario o mediante MD a @BlueMonday1971.
Gran resumen, y me quedo especialmente con la frase final. Para mí incluso está más cerca de Mudcrutch que de "Highway Companion". Discazo el de Mudcrutch por cierto. Igual merecería un post para darlo a conocer. Seguro que hay mucha gente que se ha perdido esa joyita. Abrazos.
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