Paul Simon y Art Garfunkel crecieron en el Kew Gardens Hills del Queens de Nueva York, donde formaban parte de una nutrida comunidad judía. Amigos y compañeros de clase desde temprana edad, pronto comenzaron a escribir sus propios temas, unas composiciones donde el tremendo impacto de los Everly Brothers era ya una evidencia.
En 1957 el dúo debutaba con "Hey, Schoolgirl", un modesto éxito que les inspiraría la suficiente confianza como para aspirar a cotas más elevadas.
Simon y Garfunkel iniciaron estudios universitarios y no fue hasta 1963 cuando comenzaron a adquirir notoriedad en la escena folk del Greenwich Village de Nueva York, momento en el que Paul Simon le muestra a Art Garfunkel algunas composiciones propias que les empujan lo necesario como para emprender una carrera discográfica.
En Octubre de 1964 Columbia publica "Wednesday Morning, 3 A.M.", el primer álbum de estudio de Simon y Garfunkel. Una pequeña joya de entre los discos del dúo, llena todavía de maravillosa inocencia pasional, principal factor del fabuloso atractivo de un álbum en el que la pareja aún se encuentra en vías de aprendizaje, tratando de encontrar ese sonido que les definiría y les llevaría al estrellato.
"Wednesday Morning, 3 A.M." es una grabación esencialmente folk, variada pero llena de acertada coherencia. Todo esto antes de que el folk se electrificase, cuando las letras lo eran todo y las composiciones políticas y sociales movían, en cierto modo, el mundo.
Un trabajo completamente acústico, sin guitarras eléctricas y sin baterías, algo que otorga a "Wednesday Morning, 3 A.M." un sonido puro y natural al que contribuye la limpia producción de Tom Wilson.
Sólo las voces de Paul Simon y Art Garfunkel, las acústicas del propio Simon y Barry Kornfeld, y el contrabajo de Bill Lee, son los únicos instrumentos que suenan en el disco, y refuerzan el ambiente folk de un trabajo en el que las armonías vocales complejas y deliciosas son las verdaderas protagonistas, al tiempo que muestran la pulcritud sonora del dúo.
"Wednesday Morning, 3 A.M." captura de manera maravillosa el idealismo y la pasión de los años de Kennedy, y comienza a mostrar el talento como compositor de Paul Simon, atisbándose sin duda alguna la figura de un genio.
Solamente cuatro temas del álbum fueron compuestos por Simon, pero en ellos se vislumbra el futuro a través de unas letras mezcla de poesía y simbolismo abstracto, verdaderas obras de arte en algunos de los casos. El resto son en su mayoría versiones y adaptaciones folk y gospel revisadas con pasión y delicadeza, y un par de clásicos de su década.
El álbum abre con "You Can Tell The World", algo más que un tema de gospel que se desplaza por la mitología bíblica en una maravillosa revisión de la tradición iniciada por Bob Camp y Bob Gibson.
Después "Last Night I Had The Strangest Dream", el clásico que haría popular Ed McCurdy en 1950, banda sonora del movimiento por los derechos humanos en la década de los 60, plegaria por la paz mundial a bordo de las maravillosas voces de Simon y Garfunkel.
"Bleecker Street" es una de las cimas de "Wednesday Morning, 3 A.M.". Un maravilloso poema sobre la vida en el "Greenwich Village que en ocasiones ha sido catalogado como extremadamente intelectual. Un tema plagado de inmensas armonías vocales que hoy sería un clásico si hubiese recibido algo más de atención por parte de las emisoras de la FM estadounidense.
"Sparrow" es otra de las composiciones iniciáticas de Simon, poderosa y maravillosamente simple, alegoría sobre el abandono a los más necesitados.
La liturgia medieval de "Benedictus" deja la curiosidad de escuchar a dos jóvenes judíos cantando las maravillas del nacimiento de Cristo. Fantásticamente interpretada aunque sigue generando dudas sobre su ubicación en el álbum.
La otra cima de "Wednesday Morning, 3 A.M." es por supuesto la primera versión de "The Sound Of Silence", sin la batería y sin la guitarra eléctrica que posteriormente se añadieron. Delicia folk de un sonido similar al de "Bleecker Street".
"He Was My Brother", inmenso tema que representa a la perfección el espíritu de los 60, tributo sentido a su amigo Andrew Goodman, uno de los tres activistas asesinados en Neshoba County el 21 de Junio de 1964.
De nuevo el dúo adapta una vieja pieza tradicional, en este caso irlandesa. Es "Peggy-O", a continuación de la cual "Go Tell On The Mountain" continúa la tradición gospeliana interpretada como siempre con suma delicadeza.
Sigue "The Sun Is Burning", un tema del Ian Campbell Folk Group, británicos revisionistas de la tradición folk. Un poderoso corte antibelicista que precede al "The Times They Are a-Changin'" de Dylan, plagado de grandes armonías vocales y un sonido absolutamente riguroso.
"Wednesday Morning, 3 A.M." finaliza el debut de Simon y Garfunkel contando la historia de un hombre que tras cometer un crimen debe abandonar a la mujer que ama. Nueva y maravillosa composición de Simon que se regrabaría como "Somewhere They Can't Find Me".
Bajo la sombra de la Invasión Británica "Wednesday Morning, 3 A.M." no tuvo la repercusión que hubiese merecido. Simon se trasladaría a Inglaterra, donde haría una pequeña carrera, y Garfunkel reanudaría sus estudios universitarios. El álbum se editaría de nuevo en 1966 siguiendo la estela del éxito de la versión eléctrica de "The Sound Of Silence".
Evidentemente "Wednesday Morning, 3 A.M." no es tan accesible como "Bookends" o "Bridge Over Troubled Water", pero se antoja imprescindible para ver de donde vienen Simon y Garfunkel y como van a evolucionar hacia esos últimos trabajos.
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