Mostrando entradas con la etiqueta 1981. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta 1981. Mostrar todas las entradas

viernes, 9 de mayo de 2014

DON'T SAY NO - Billy Squier, 1981. Crítica del álbum. Review. Reseña.


Ponerse a pensar en músicos que tras cosechar éxitos notables cayeran en el olvido nos termina llevando de manera irrevocable, entre otros, a Billy Squier. El guitarrista y vocalista de Boston se había embarcado en una banda llamada Piper que llegó a abrir para Kiss en su gira norteamericana de 1977. Ojo porque "Piper", el debut discográfico en 1976 de aquellos Piper, es un discazo, lo mismo que su segundo y último álbum, "Can't Wait", que comentaremos en otra ocasión.


viernes, 21 de febrero de 2014

WILD-EYED SOUTHERN BOYS - 38 Special, 1981


Ser vecino de los Van Zant a comienzos de los 70 debió ser algo apasionante, y es que compartir jardín con Ronnie Van Zant, el vocalista de Lynyrd Skynyrd, debe llegar a acojonar, sobre todo si eres Don Barnes, un tipo con gran chorro de voz y ganas de formar tu propia banda. Montarla con Ronnie, ese tipo que había elevado a sus Lynyrd Skynyrd a los altares del rock sureño, era complicado, pero para eso estaba su hermano Donnie. Dicho y hecho, Don Barnes y Donnie Van Zant aunaban esfuerzos en 1974 y formaban una banda llamada 38 Special.

jueves, 7 de marzo de 2013

HIGH 'N' DRY - Def Leppard, 1981


En 1980 Def Leppard había lanzado su álbum de debut. "On Through The Night", de cierto aroma a Judas Priest, no es seguramente la carta de presentación más original de la historia del rock, pero se convirtió desde su publicación en una de las pequeñas joyas de la NWOBHM (New Wave Of British Heavy Metal).
El contenido de "On Through The Night" permitía intuir que nos encontrábamos ante una banda con muchas posibilidades de hacerse un hueco entre la élite del negocio. Pero más importante aún, ese contenido y la gira de presentación posterior llamaron la atención de uno de los tipos más influyentes de la industria.
Efectivamente, Robert John "Mutt" Lange, el tipo que había producido el colosal "Back In Black" de AC/DC, lanzado en verano de 1980, se interesó por aquellos cinco veinteañeros, algo fundamental en el devenir de Def Leppard.
En Julio de 1981 Def Leppard colocaba su segundo trabajo de estudio. "High 'N' Dry" se convertía sin duda en el que sería el álbum más honesto de la carrera de los británicos, probablemente su mejor trabajo, y eso ya es mucho decir si tenemos en cuenta que después vendrían "Pyromania" y "Hysteria".
Es por supuesto decisiva la producción de Lange en "High 'N' Dry". El disco, está claro, conserva algunos de los elementos de la NWOBHM que habían caracterizado al "On Through The Night", pero al mismo tiempo muestra de manera evidente como la banda estableció su nueva identidad y exploró territorios hasta ese momento desconocidos.
La influencia del "Back In Black" de AC/DC no debe ser considerada un reproche. Es algo lógico y natural que uno de los mejores discos de la historia del rock se convierta en una fuerte influencia para unos chicos que quieren parecerse a sus ídolos, pero si además su productor es el mismo aquello se convierte en algo casi obligatorio.
Robert John "Mutt" Lange consiguió una producción limpia, tratando de manera acertada de contener el ímpetu, la energía y la intensidad de la banda, una banda hambrienta, con ganas de demostrar al mundo de lo que eran capaces. Aún así Def Leppard mantuvo un sonido crudo y enérgico, algo que iría desapareciendo a medida que publicaban álbumes.
Joe Elliott en pleno derroche juvenil, más duro que nunca, Pete Willis y Steve Clark formando un irrepetible combo de guitarras, el mejor que jamás ha tenido la banda, Rick Allen golpeando más fuerte que nunca y Rick Savage absolutamente participativo componen la ya mítica formación que grabó para la posteridad este eléctrico "High 'N' Dry", excelente en sus letras, magnífico en lo musical.
"Let It Go" levanta el telón del "High 'N' Dry" bajo formato de colosal trallazo de rock en el que brilla, como a lo largo de todo el álbum, un motivado Joe Elliott y destaca un furioso solo de guitarra. "Another Hit And Run" regala la fantástica línea de bajo de Rick Savage y un magnífico solo cortesía de la dupla Clark/Willis. Fabuloso tema de ritmos cambiantes y contagiosos. 
El aroma AC/DC emerge con fuerza en "High 'N' Dry (Saturday Night)", de ritmo trepidante y letras cachondas. "Bringin' On The Heartbreak" sienta los estándares de las power ballads, con un Elliott emocionante y una vez más con formidable solo.
La instrumental "Switch 625" presenta una excelente línea de bajo y unas trepidantes guitarras. Es posible que con letras hubiese mejorado. El espíritu hard rock de "You Got Me Runnin'" se manifiesta en forma de grandes armonías vocales, poderosas guitarras y durísimas líneas de bajo, cimentando un fuerte ritmo.
"Lady Strange" es una pequeña joya en la que Elliott suena muy grande, dotando de color a una melodía en la que destacan su rápido puente y su sólido solo. "On Through The Night" es otro pelotazo rockero que solo baja la guardia durante el puente. Otra vez grandioso solo.
El ritmo duro e insistente de "Mirror, Mirror (Look Into My Eyes)" lleva sin remisión a "No No No", el tema  que de la manera más dura posible cierra "High 'N' Dry". Inmenso el combo rítmico Allen/Savage en una composición de fuerte olor a Judas Priest.
"Pyromania" y "Hysteria" les colocaron en la élite, pero Def Leppard eran lo que se escucha en "High 'N' Dry", un formidable esfuerzo que capturó sin objeciones el rock que la banda llevaba dentro. Por supuesto aquellos dos discos son trabajos de inmensas proporciones, pero en ellos hay matices que tamizan pretendidamente el sonido del grupo, algo que en "High 'N' Dry" no sucede. Este es el disco imprescindible de la carrera de Def Leppard, el disco al que hay que acudir para saber quienes eran y quienes son. Fundamental.


viernes, 15 de febrero de 2013

DIFFICULT TO CURE - Rainbow, 1981


Por circunstancias que no vienen al caso, Rainbow, la banda que Ritchie Blackmore había formado cuando en 1974 no admitió el cambio de dirección en el nuevo Deep Purple de David Coverdale, había pasado por diferentes y variadas formaciones. En 1980, y tras la gira del "Down To Earth", el baterista Cozy Powell y el vocalista Graham Bonnet abandonaban la banda del mago de las seis cuerdas.
Blackmore quería dar una nueva orientación al sonido del grupo, pero necesitaba un nuevo cantante y también un baterista que además encajasen en ese sonido diferente. Bobby Rondinelli, un tipo que había tocado la batería para diversas bandas menores neoyorquinas fue reclutado por Ritchie Blackmore en 1980. Joe Lynn Turner, el vocalista de Fandango, una banda con pretensiones de rock sureño, fue el encargado de sustituir a Graham Bonnet en ese mismo año.
Blackmore como guitarra y líder de la nueva formación, su viejo compañero Roger Glover con el bajo, el teclista Don Airey, el mismo que había tocado para Black Sabbath y Gary Moore, y las nuevas incorporaciones Turner y Rondinelli, componían el nuevo grupo que como Rainbow iba a dar una vuelta de tuerca en su sonido característico.
En Febrero de 1981 Rainbow lanzaba su quinto álbum de estudio, "Difficult To Cure". Sin entrar a valorar las preferencias por las diversas formaciones de Rainbow, con Ronnie James Dio, Graham Bonnet o Joe Lynn Turner como vocalistas, "Difficult To Cure" obtuvo un sonido de rock clásico a principios de la década de los 80 que en contadísimas ocasiones  ha sido reproducido con fidelidad, un sonido que realmente no ha perdido su frescura escuchándolo en la actualidad. La verdad es que Joe Lynn Turner demostró unas dotes como vocalista fuera de toda duda, y Blackmore superó con éxito la tortuosa transición desde el rock duro hasta el rock digamos que más comercial. 
Varias acusaciones se vertieron sobre el genio Blackmore tras el lanzamiento del "Difficult To Cure". Dos de ellas sobre todo, deberían ser tenidas en cuenta, se compartan o no. En primer lugar se le acusa de dotar al nuevo sonido de la banda de un enfoque tipo Van Halen, pensando que a pesar de la calidad de los primeros trabajos de Rainbow no había obtenido los resultados comerciales que la banda merecía. En segundo lugar se sigue comentando la orientación AOR que Blackmore decidió para este nuevo álbum, abandonando su consolidada integridad de músico consagrado. Sinceramente, Blackmore sólo trató de adaptarse a los sonidos imperantes en los comienzos de la década de los 80, tal vez con un poquito de Bad Company por aquí y otro poquito de Foreigner por allá, siempre bajo el particular prisma del genio. Un mundo el del rock en constante cambio y adaptación en el que por supuesto Blackmore aportó su granito de arena en forma del que considero un auténtico discazo de inicios de década, puede que símplemente en un estilo de hard rock digamos que progresivo.
"I Surrender" abre "Difficult To Cure" de manera brillante. El clásico de Russ Ballard cobra verdadero sentido de la mano de Ritchie Blackmore y la voz de Joe Lynn Turner asombra ya desde la primera pista, demostrando sin duda una inmensa superioridad sobre Graham Bonnet. Tema potente y optimista que te pone en órbita de cara al resto del álbum. Éxito inmediato y puesta de largo en las radios de todo el mundo incluso hoy en día. "Spotlight Kid" nos devuelve al hard rock con plena intensidad  través de una maravillosa sección instrumental que incluye grandes solos de guitarra y teclados a cargo de Blackmore y Don Airey. Emocionantísimo el poderío vocal de Turner. "No Release" continua por la senda del hard rock, esta vez de la mano del soul y del blues. "Magic" arrastra una melódica línea de guitarra que comparte protagonismo con un portentoso Turner"Vielleicht Das Nächste Mal (Maybe Next Time)" es melódica, depresiva y bonita al mismo tiempo, con Blackmore haciendo llorar a su guitarra suavemente. Fabuloso corte instrumental en el que cobra significado hablar a través de la guitarra. "Can't Happen Here" se transforma en un pedazo de tema de rock clásico, banda sonora de cualquier película sobre catástrofes de la mano de un excelente heavy rock progresivo, en la misma línea que "Freedom Fighter", un trallazo de rock duro de inteligentes letras.  "Midtown Tunnerl Vision" presenta otro fabuloso solo a cargo del de siempre. La Novena de Beethoven le sirve a Blackmore para acabar el álbum de asombrosa manera con este instrumental "Difficult To Cure". Sorprendente y decisivo final, puede que incluso algo pretencioso, que se convirtió en básica de sus directos.
Supongo que "Difficult To Cure" no es el mejor disco de Rainbow y supongo también que si es el mejor disco de Rainbow con Joe Lynn Turner, pero lo que está claro es que se trata de un álbum fabuloso en el que cinco músicos excepcionales se dedican símplemente a hacer lo que mejor saben hacer, e independientemente de la orientación que pudiese haber tomado la cabeza pensante de Rainbow, el "Difficult To Cure" es hoy y sin duda, un pedazo de clásico.